El Museo Judío de Berlín no deja de sorprenderme, cada vez que escucho algo sobre él me sorprendo cada vez más. Es decir, para mí, es uno de los edificios más completos y mejores que existen, porque tiene un concepto muy fuerte y el cual esta reflejado en cada detalle. Lo que Daniel Libeskind muestra, a través de obras artísticas y objetos de la vida cotidiana, es la historia de los judíos que viven y vivieron en Alemania durante los últimos dos mil años.La idea principal que transmite el edificio es el vacío que han dejado los judíos berlineses desaparecidos durante el Holocausto nazi y las sensaciones que causa el estar en el Jardín del Exilio (caminar dentro de el "bosque" de pilares con plantas más el piso inclinado) son realmente impresionantes; es como si retrocedieras mil años.
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